lunes, 28 de febrero de 2011

Pere Darder, expert en intel·ligència emocional

Mestre de mestres!
Pere Darder té 78 anys i una vitalitat inesgotable. És un mestre jubilat que mai s'ha desvinculat de l'educació. Ha estat cofundador de l'Escola Costa i Llobera i és expresident del Consell Escolar de CatalunyaVa impulsar la creació d'un grup de recerca sobre les emocions (DPE, Desenvolupament Personal i Educació). Considera que la teoria de les intel·ligències múltiples, la de les neurociències i la de la complexitat han estat claus perquè les emocions es valorin a l'hora d'educar. Darder ha escrit una bona pila de llibres, com 'Sedueix-te per seduir, viure i educar les emocions'.

ARA Mestres: Us presentem el Pere Darder, expert en intel·ligència emocional

Publicat a Ara 28/2/2011

martes, 22 de febrero de 2011

Los niños que quieren oír muchas veces el mismo cuento aprenden más rápido


Repetir una y otra vez el mismo cuento es bueno para el aprendizaje de los niños, según un estudio de la Universidad británica de Sussex, cuyos autores consideran que es esta repetición lo que acelera la adquisición del vocabulario.
El estudio fue dirigido por la psicóloga Jessica Horst y sus resultados son consecuencia de un experimento en el que se expuso a dos grupos de niños de 3 años al aprendizaje de dos palabras nuevas.
Cada una de ellas era una palabra inventada para designar un objeto desconocido, como por ejemplo "sprock" para referirse a un artículo manual empleado para mezclar comida.
Durante el plazo de una semana, uno de los grupos escuchó tres historias diferentes con estas palabras, mientras que el otro grupo escucho una única historia con las mismas palabras nuevas.
Pasado ese periodo, se constató que los niños a los se había contado solo un cuento recordaban mejor las nuevas palabras que los niños a los que se había contado tres historias diferentes.
"Sabemos que cuanto mayor es el número de libros que se tienen en casa, mejores son los resultados académicos de los niños, pero lo que no hemos comprendido es cómo ocurre es aprendizaje", dijo Horst.
"Lo que esta investigación sugiere -explicó la psicóloga- es que lo importante no es el número de libros, sino la repetición de cada uno de ellos, porque es lo que propicia un mayor aprendizaje".
Horst indicó que ya era conocido que los niños que ven el mismo programa de televisión o la misma película una y otra vez "ofrecen mejores resultados en los posteriores exámenes de comprensión".
"Lo que creemos que está ocurriendo con la lectura es que cada vez que un niño escucha el cuento está adquiriendo nueva información. La primera vez puede ser solo la comprensión de la historia, la segunda la percepción de los detalles y la descripción, y así progresivamente", dijo la profesora del centro británico.
"Y si la nueva palabra se introduce en una variedad de contextos, como ocurrió con aquellos a los que se les leyeron tres cuentos diferentes, lo más probable es que los niños no logren concentrarse tanto en la palabra nueva", añadió la investigadora.
En conclusión, indicó Horst, "el mensaje podría ser que los niños no precisan necesariamente de una gran cantidad de libros, sino que se benefician de una exposición repetida a los que tengan".
La investigación completa se publicará este mes en la revista "Frontiers in Psychology".

Noticia de Efe publicada en ABC 22/2/11

miércoles, 9 de febrero de 2011

Esto me suena - Educar a los niños a través de cuentos


La ONG Bosques sin Fronteras ha creado unos cuentos en los que los árboles son sus protagonistas. El objetivo de este proyecto es la educación de los niños para cuidar los bosques. Además hoy conocemos la profesión de carillonista de la mano de Anna M. Reverté. En "29 segundos y medio" hablamos con calvos que estén muy contentos con su calvicie. Y el vecino Soriano nos recuerda que se cumplen 70 años desde que La Dama de Elche regreso a España desde el Louvre, y alguien que sabe mucho de eso, Rafael Ramos Fernández, director del Museo Arqueológico de Elche, nos cuenta más cosas.

Publicado en RTVE el 9/2/11

jueves, 3 de febrero de 2011

En África los cuentos juegan el papel de la educación

La escritora de Benin Agnés Agboton imparte en la UCA una conferencia sobre la tradición oral en su continente

El primer cuento que escuchó no hablaba de princesas de cabello kilométrico, ni de dragones y castillos encantados. Tampoco terminaba con una banquete de perdices. Se refería a las disputas de las dos esposas de un mismo hombre y de cómo el mal solo trae más desgracias. La escritora Agnés Agboton nació en Porto Novo (Benin) hace cincuenta años, pero llegó a Barcelona con solo 17. Desde entonces su labor ha estado encaminada a tender puentes entre las dos culturas, la europea y la africana. Cuenta con el arma de la palabra. La dicha. Hoy imparte, a la 13:00 horas, la conferencia 'Tradición oral africana: un rito para otros cuentos', dentro del ciclo de Miércoles de Letras, en el salón de Grados de la facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Cádiz.
«En África los cuentos juegan el papel de educación, teatro y transmisión de valores», comenta la filóloga hispánica y escritora. Una tesis que resume en un lema africano que a modo de epitafio reza: «Cuando en África se muere un viejo es como si ardiese una biblioteca».
Precisamente los anaqueles repletos de libros han sustituido en España a los cuentos al calor de la chimenea. «Conozco cuentos andaluces y gallegos, pero por desgracia se ha ido perdiendo esa tradición. Es una pena porque se trata de dos actos muy diferentes, uno es individual, en el otro prima el contacto humano», sostiene la escritora africana. Añora a su tierra y agradece la acogida, aunque asegura que no siempre han sido bien recibidos sus argumentos conciliatorios. «No importa, no pierdo el tiempo con estúpidos», se defiende, y pone la otra mejilla, «cada vez que regreso a casa bebo de su fuente para a la vuelta poder compartirla con esta sociedad».
Agboton, apellido que significa 'cuando sale el carnero, las ovejas se esconden', estudió Filología Hispánica, explica cuentos africanos y escribe libros de relatos y de cocina africana. Confiesa que le costó adaptarse a la gastronomía española, pero que ahora es un experta en la tortilla de patatas. Una y otra cocina no son sino símbolos de una manera de vivir. «En África no hay tres platos, tampoco postre, eso se debe a la colonización, allí se comparte un plato entre cuatro o cinco, aquí es un acto individual», comenta.
La distancia geográfica no impide a la escritora sentir muy adentro a su Porto Novo natal. Pese a la globalización. «No estoy en contra del progreso en el continente africano, pero no me gustaría que se perdiese nuestra identidad cultural. Ya hay zonas en las que ha llegado la globalización, sobre todo las grandes ciudades», lamenta la autora de 'Voz de las dos orillas' (2009). Uno de los rasgos característicos de esa cultura es su religión. Por eso se muestra encantada cuando le dan la oportunidad de explicar el sentido del animismo. «Es un respeto absoluto a la naturaleza. Cuando un labrador va a cortar un árbol le pide perdón. Los elementos naturales son los intermediarios entre el dios supremo y los hombres. Hay quien piensa que es un pensamiento atrasado, pero no es así», sentencia Agboton.

Publicat a lavozdigital.es el 2.2.11

Disney reinventa los cuentos de princesas para realizar una fábula sobre la libertad

Enredados mezcla el encanto de clásicos de la animación y ciertas dosis corrosión

La película más moderna, revolucionaria y chispeante de animación de la temporada está basada en... una princesa destronada, un reino de fantasía y un príncipe que no parece un príncipe. Casi 200 millones de dólares se ha gastado la factoría de Mickey Mouse para devolver a la vida al cuento de Rapunzel, esa historia mítica de los hermanos Grimm sobre esa bella muchacha encerrada en una torre cuya larga cabellera tiene poderes mágicos. Y el resultado es, una vez más cuando hablamos de la creadora por antonomasia de fantasías animadas, apoteósico: Enredados es una película dotada de la gracia y el encanto de los filmes clásicos de la productora como La sirenita o La bella y la bestia, a sumar ciertas dosis de corrosión quizá cortesía del nuevo amo del cotarro, mr. Pixar, o sea, John Lasseter, que aquí hace las veces de productor ejecutivo. La mayor parte del mérito, que es mucho, sin embargo, corresponde a Glenn Keane, animador de casi todas las películas de los últimos veinte años de Disney, y los directores, los casi debutantes Nathan Greno y Brian Howard.

Los cuentos de los hermanos Grimm quizá conocen tantas versiones como personas los han contado y, desde luego, en Disney se toman la libertad de adaptarlo como quieren. En la versión original el príncipe era él, y no ella, aquí, él es un ladrón amable, un chico huérfano y guapo que sueña con hacerse rico y convertirse en algo más que un paria. Y ella adopta en esta nueva versión un rostro que puede hacernos pensar en esta Enredados como una versión muy libre de tres mitos mucho más recientes. Por ejemplo, es fácil pensar en una versión light de la peripecia de Natascha Kampusch, esa austríaca que vivió secuestrada quince años, u otra historia aun más siniestra, la del Monstruo de Amstetten, ese padre luciferino del mismo país que encerró a su hija y a sus hijos-nietos durante años y que se transforma en Enredados en la malvada antagonista. Incluso, enredando aun más el asunto, esta película puede verse como una versión infantil de la griega Canino, ya que aquí también encontramos a una víctima que vive oculta del mundo exterior, ese lugar horrible que sólo contamina las almas y estropea los corazones, y una interesante reflexión sobre la construcción de la realidad a partir del lenguaje como significante.

Partiendo de un esquema clásico, Enredados no juega, o casi no juega, a la ironía posmoderna como Shreck. La Edad Media surge en Enredados no como un lugar para dar rienda suelta a un humor basado en el anacronismo chistoso sino como una reinvención del pasado mítico de Occidente versión bucólico-pastoril. El reino de la película está basado en una tiranía amable y la existencia de la pena de muerte no atenúa su condición de lugar para la justicia. La carga de vitriolo que ya es habitual en el cine reciente de Disney no hay que encontrarla, por tanto, en una metáfora política que se esquiva ni siquiera en el ya inevitable mensaje feminista (en este caso muy suave) sino en su contundente manifiesto a favor de la autonomía de los hijos respecto a las padres, que incluye una muerte violenta e insospechada y supone una agresiva e inesperada relectura de la teoría clásica freudiana de "matar al padre", en este caso simbolizado por una madre pérfida que es una de las malvadas más logradas y complejas del cine reciente de Disney.

Como ya es norma, Enredados llega en doble versión. Aunque las tres dimensiones sigue despertando ciertos recelos incomprensibles entre algunos puristas, la insuperable tecnología de la película, que combina con virtuosismo lo mejor del lápiz y el ordenador aporta momentos memorables de gran belleza plástica entre los que cabe destacar la hermosa escena de las linternas nocturnas, en las que se logra algo muy difícil, un romanticismo desatado y dosis de emoción. Es, también, uno de los escasos momentos en los que el filme pierde viveza. Mientras la factoría Pixar, puntal de Disney, ha triunfado ofreciendo productos de enorme riesgo artístico como Wall-e, donde apenas hay palabras durante más de media hora, o Toy Story 3, que ofrece un crepuscular y elegíaco canto al fin de la infancia, Enredados pretende ofrecer entretenimiento sin casi pausa al espectador enlazando una tras otra escenas de acción y frenesí en el más puro estilo Indiana Jones, película a la que se homenajea haciendo uso de una sartén, elemento que la película convierte en un icono con sorprendentes resultados. Buenhumorada y llena de buenas intenciones, Enredados viene a confirmar el momento de plenitud de la animación y un hecho quizá indiscutible, a la hora de montar grandes espectáculos, Hollywood arrasa.

Publicat a elcultural.es el 2.2.11